ONP, mayo 2024: cronograma de pagos

Catástrofe digital

“Si en el 2020 la demanda de la digitalización se incrementó exponencialmente, en el 2021 su usabilidad debe mejorarse exponencialmente. De lo contrario se viene una catástrofe más”.

El Perú ha entrado de nuevo en una fase crítica respecto del número de contagios del C19. También está confirmado que la variante inglesa del virus –la “bestia”, como es conocida en el Reino Unido por la ferocidad con que está diezmando a poblaciones por el mundo– ya está rondando por las calles del Perú.

Que la Defensoría del Pueblo haya instado encarecidamente ayer a empleadores públicos y privados a priorizar de nuevo el teletrabajo, para disminuir la movilidad de los peruanos; es un atisbo de cómo será el año 2021.

Sin duda alguna ser digital este año será era algo imperativo si es que se quiere seguir con vida.

Si durante el 2020 el C19 no nos dio tregua para adaptar nuestras vidas a la nueva normalidad digital, este año tenemos la obligación de hacerlo bien, rápido y de la manera más equitativa posible.

Para ello, las prioridades deben apuntar a corregir los errores del 2020 en tres ámbitos críticos: teleducación, trámites on-line y teletrabajo.

Por ejemplo, la teleducación requiere además de una buena conexión a Internet, de dispositivos con contenidos que habiliten capacidades para la nueva normalidad.

Y en el caso de los trámites en línea, es fundamental lograr que los respectivos sitios web del Estado cumplan con facilidades de usabilidad (w3c) para todos los peruanos, garantizando también la seguridad y confidencialidad de las transacciones y el tratamiento de nuestros datos personales.

Finalmente, respecto del teletrabajo, es necesario que se culmine con todas las regulaciones pendientes, a fin de convertirlo en una modalidad laboral regular y no solo de urgencias.

Si en el 2020 la demanda de la digitalización se incrementó exponencialmente, en el 2021 su usabilidad debe mejorarse exponencialmente. De lo contrario se viene una catástrofe más.

La República

Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.