Ciencia y tecnología salen del desván

Si hay un sector, además de la cultura, que ha vivido las últimas décadas en el desván de nuestra historia, es la ciencia y la tecnología. Poco presupuesto estatal, mucha burocracia y reticencia del ámbito privado para darle un real impulso.

Pese al esfuerzo y tenacidad de los funcionarios que se las ingenian para promover actividades destinadas fundamentalmente a despertar interés en la CyT, difundir iniciativas y a lograr que sea materia de agenda pública, los resultados son magros. Tan magros como la inversión que recibe.

Pero esa existencia en el desván llegó a su fin en el 2020, pandemia de por medio. Se pusieron las alertas y el foco de la atención se centró en vacunas “a la peruana”, pruebas moleculares rápidas, reparación de camas de cuidados intensivos, investigación de nuevas cepas y cuanta inventiva lograra que pudiéramos enfrentar como país el virus mortal.

Todas las carencias se evidenciaron: los trámites burocráticos ad infinitum, la poca inversión privada y un Estado que no promueve mediante un presupuesto respetable este sector que hoy por hoy resulta vital no solo para el desarrollo futuro, sino para la sobrevivencia del mañana.

Así las cosas, el 2021 llega con su agenda pública propia y en los primerísimos lugares de interés, además de empleo, salud y educación, figura la ciencia y la tecnología.

Esta es una dinámica que no es exclusiva del Perú, otros países están invirtiendo grandes sumas en obtener independencia científica y tecnológica no solo para enfrentar segundas o terceras olas, sino para innovar en la industria, la agricultura, la minería y un largo etcétera.

Los medios de comunicación también se han sumado a esta cruzada como una tarea prioritaria. Programas como Ruta CTi que se transmite en RTV son muestra palpable de este esfuerzo.

También es importante la iniciativa que ha adoptado el Concytec, ente estatal dedicado a promover ciencia y tecnología, al convocar a candidatos presidenciales para que hoy den a conocer su plan de gobierno en esta materia. Será importante escuchar a todos los hombres y mujeres que aspiran a la presidencia proponer acciones que hagan posible una CyT robusta, nacional y aplicable a todos los sectores productivos y de servicios de nuestro país.