75º aniversario de las Naciones Unidas

Columnista invitado, Igor Garafulic (*)

Las Naciones Unidas celebran su 75º aniversario cuando el mundo atraviesa una crisis sin precedentes. El 2020 marca también el quinto año desde la adopción de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y el inicio de la Década de Acción por los ODS. Estas conmemoraciones han delineado la agenda de la 75ª Asamblea General inaugurada hace unos días de manera virtual.

El presidente Martín Vizcarra señaló que el Perú se encuentra enfrentando al COVID-19 con un plan de acción enfocado en el cumplimiento de la Agenda 2030 como hoja de ruta que debe guiar las decisiones del país a nivel nacional e internacional, recogiendo el principio transformador de los ODS para cerrar las brechas sociales. La ONU en el Perú saluda este anuncio y reafirma su compromiso de trabajar con el Gobierno y la sociedad peruana en su conjunto. Sabemos además que este compromiso del país refleja las prioridades de la sociedad peruana. Un estudio que hemos realizado muy recientemente con la empresa IPSOS nos ha confirmado que el 84% de peruanas y peruanos considera importante el papel de la cooperación internacional para enfrentar la pandemia, y 91% considera que es necesaria para resolver los desafíos mundiales.

El secretario general, António Guterres, ha señalado que el COVID-19 es una tragedia humana, pero también ha creado una oportunidad generacional. Una oportunidad de construir un mundo más inclusivo y sostenible, mirando a través del prisma de los derechos humanos, fortaleciendo la protección social y cambiando sistemas de salud inadecuados por unos centrados en las personas, haciendo además frente a las desigualdades estructurales, la degradación ambiental y la crisis climática.

Mientras continuamos dando respuesta inmediata a la pandemia, la ONU en el Perú viene compartiendo su plan de respuesta y recuperación socioeconómica hasta fines de 2021, con un enfoque de DDHH y basado en cinco pilares: la salud primero; proteger a las personas; respuesta y recuperación económica; respuesta macroeconómica y colaboración multilateral; y cohesión social y resiliencia comunitaria.

Con una visión de desarrollo integral e inclusiva, el plan prioriza a los grupos en situación de mayor vulnerabilidad que han sido más fuertemente golpeados por la crisis, incluyendo personas con discapacidad; mujeres, niños, niñas y adolescentes; pueblos indígenas; personas afrodescendientes; personas LGTBI; personas privadas de libertad; población refugiada y migrante; personas desplazadas internamente, entre otros.

Hasta julio, ONU Perú había reprogramado o movilizado nuevos recursos por más de US$ 108 millones para la respuesta inmediata al COVID-19, además de adecuar sus planes estratégicos. Asimismo, desde el Sistema de Naciones Unidas, estamos completando tres estudios sobre el impacto socioeconómico en los hogares peruanos, que se suman a los más de 40 estudios especializados, que esperamos sirvan como evidencia y aporten técnicamente al desarrollo de políticas públicas.

Hoy que cumplimos 75 años en un contexto de pandemia, la Agenda 2030 cobra aún más vigencia y se hace más necesario el trabajo conjunto para alcanzar los ODS, sin que nadie se quede atrás.

En palabras de António Guterres, “mientras recordamos tantas vidas perdidas, no olvidemos nunca que nuestro futuro depende de la solidaridad: como personas unidas y como naciones unidas”.

(*) Coordinador Residente de las Naciones Unidas.