Cuello electoral

Este diario ha alertado sobre la lentitud de los procesos que llevan a cabo el Congreso y la Junta Nacional de Justicia (JNJ) referidos a los casos de los llamados “Cuellos Blancos”, un retraso que podría implicar que miembros de este grupo investigado por corrupción copen el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) o aumenten su influencia en este organismo encargado de las elecciones del año 2021.

Como se ha dicho, en julio próximo concluye el período de designación del fiscal supremo titular Luis Carlos Arce Córdova ante el JNE, por lo que la Junta de Fiscales Supremos (JFS) deberá decidir si lo ratifica por otros cuatro años o designa a su reemplazante. Luego, en noviembre concluye el mandato del actual presidente del JNE, el vocal supremo Víctor Ticona Postigo, por lo que la Corte Suprema deberá elegir a un nuevo titular del ente electoral. A ello habría que agregar que también en julio de este año culmina su período el representante del Colegio de Abogados de Lima (CAL) ante el JNE, y que en setiembre termina su mandato el representante de las facultades de Derecho de las universidades públicas.

En un contexto en el que cuatro de los cinco miembros que componen el JNE se renuevan en breve, debe considerarse lo que pasa en el Ministerio Público, donde los fiscales Pedro Gonzalo Chávarry, Tomás Gálvez y Víctor Raúl Rodríguez forman la mayoría de este organismo y podrían decidir que uno de ellos acuda al JNE. Como se sabe, los tres han sido denunciados de formar parte de los “Cuellos Blancos”.

Por otro lado, en la Corte Suprema la elección de su actual presidente demostró la crisis en esta instancia de decisión judicial a tal punto que el titular de este organismo fue elegido con seis votos, estando claro por diversas expresiones públicas e internas el compromiso de varios vocales supremos con el grupo antes mencionado. De hecho, existe el riesgo de que el nuevo representante del Poder Judicial ante el JNE, y por lo tanto su nuevo presidente, sea partidario o cercano a esta misma organización bajo investigación.

No obstante, las denuncias contra varios fiscales supremos y magistrados del PJ se encuentran paralizadas en el Congreso, sin fecha de reinicio de los procesos, en tanto que las investigaciones a cargo de la JNJ están congeladas precisamente en este punto. Este es un caso en que la falta de diligencia de dos organismos puede terminar afectando a un tercero, con una grave incidencia en las próximas elecciones generales que requieren de transparencia y predictibilidad.