Indignación: muere mujer iraní presuntamente golpeada por la Policía por llevar mal el velo
La mujer de 22 años fue arrestada por la patrulla de la moral, luego la llevaron a una comisaría para asistir a “una hora de reeducación” y terminó en coma, denunció su familia.
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Una mujer iraní Mahsa Amini falleció este viernes 16 de septiembre a consecuencia del infarto y el coma que sufrió en una comisaría, donde estaba detenida por la Policía de la moral por no llevar bien el velo, comunicaron medios del país persa.
“Mahsa Amini, que entró en coma tras ser detenida por una patrulla de la moral, ha muerto”, informó en una breve nota el diario reformista Etemad, que citó como fuente a un tío de la víctima.
La mujer de 22 años fue apresada el pasado martes por la tarde por no llevar el velo de manera correcta y fue conducida a una comisaría para asistir a “una hora de reeducación”, denunció su familia.
Horas más tarde, era ingresada en el hospital Kasra de la capital iraní en coma tras sufrir un ataque al corazón. La noticia comenzó a correr como la pólvora por redes sociales, en las que muchos usuarios expresaron su indignación.
La Policía confirmó, el último jueves, su arresto para “explicarle las normas de vestimenta” en un comunicado en el que rechazaba responsabilidades.
“Repentinamente, sufrió un problema del corazón (…) y fue inmediatamente llevada a un hospital”, aseguraron las autoridades policiales en un pronunciamiento recogido por medios iraníes.
El mandatario de Irán, Ebrahim Raisí, ordenó este viernes una indagación para aclarar lo sucedido.
“El presidente Ebrahim Raisí ha ordenado al Ministerio de Interior que investigue los detalles del incidente de Mahsa de manera urgente y precisa, y que presente un informe con los resultados”, dio a conocer en Twitter el Gobierno iraní.
Por su parte, Amnistía Internacional (AI) pidió una investigación criminal por la sospechosa muerte de la muchacha bajo custodia policial. Además, el grupo de derechos humanos calificó las leyes que hacen obligatorio el velo de “abusivas, degradantes y discriminatorias”.
Las explicaciones de la Policía no han convencido a muchos iraníes que han mostrado en redes sociales su indignación.
“El arresto de Mahsa Amini para recibir orientación (sobre la ropa), seguido de su infarto y coma, es suficiente para que varias generaciones de jóvenes odien la religión”, expresó ayer en Twitter el clérigo reformista Mohamad Ali Abtahi, que ocupó la vicepresidencia del país entre 2001 y 2004.
El Gobierno del ultraconservador Raisí ha aumentado en los últimos meses la presión para que las mujeres cumplan con las estrictas reglas de vestimenta y conducta.
Así, las temidas furgonetas de la llamada Policía de la moral son más visibles que antes en lugares como la plaza Tajrish, en el norte de Teherán, llenas de féminas que han sido apresadas por no llevar bien el velo.
Esta prenda es obligatoria desde la revolución de 1979 liderada por el ayatolá Ruholá Jomeiní, quien declaró que sin él las mujeres estaban “desnudas”.
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