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Biden y Xi Jinping se hablan en primera llamada después de las elecciones

El mandatario estadounidense afirmó en varias oportunidades que se quiere alejar de la política exterior de Donald Trump.

Biden confesó a Xi estar preocupado por las prácticas económicas “coercitivas e injustas” de Beijing y las represiones y abusos contra los derechos humanos en Xinjiang. Foto: AFP/Referencial
Biden confesó a Xi estar preocupado por las prácticas económicas “coercitivas e injustas” de Beijing y las represiones y abusos contra los derechos humanos en Xinjiang. Foto: AFP/Referencial

Este miércoles 10 de febrero, Joe Biden, presidente de Estados Unidos, habló con su homólogo chino, Xi Jinping, en la primera llamada telefónica desde que el norteamericano asumió el cargo en enero.

A través de un comunicado, la Casa Blanca informó que el mandatario estadounidense “compartió sus saludos y buenos deseos para el pueblo chino con motivo del Año Nuevo Lunar”.

“El presidente Biden reafirmó sus prioridades de proteger la seguridad, la prosperidad, la salud y el estilo de vida del pueblo estadounidense, y de preservar un Indo-Pacífico libre y abierto”, agregó el pronunciamiento.

Asimismo, Biden expuso su preocupación por las prácticas económicas “coercitivas e injustas” de Beijing y “las represiones y los abusos contra los derechos humanos” en Xinjiang, región donde habitan los uigures.

Ambos mandatarios intercambiaron puntos de vista sobre temas como la lucha contra la pandemia del coronavirus y la seguridad sanitaria mundial, el cambio climático y la prevención de la proliferación de armas, según el comunicado.

“El presidente Biden se comprometió a mantener compromisos prácticos y orientados hacia resultados cuando ello favorezca los intereses del pueblo estadounidense y los de nuestros aliados”, añadió la misiva.

Expectativas sobre el primer encuentro entre Biden y Xi

Más de un millón de uigures están detenidos en campos de reeducación política en Xinjiang, según los expertos.

Por su parte, Beijing rechaza el término “campos” y asegura que se trata de centros de formación profesional, destinados a brindar un empleo a la población y mantener a raya el extremismo religioso.

Hubo mucha expectativa sobre la postura del nuevo presidente estadounidense hacia China, debido a los múltiples puntos de tensión que existen en la relación entre las dos primeras potencias mundiales.

Biden mostró claramente su voluntad de distanciarse de la política exterior de Donald Trump. El vínculo con China es uno de los pocos asuntos en los que podría promover una cierta continuidad con respecto a su predecesor.

En una entrevista emitida el domingo en CBS, Biden advirtió que la rivalidad entre China y Estados Unidos se transformará en una “extrema competencia”, aunque al mismo tiempo aseguró que quiere evitar un “conflicto” entre los dos países.

Consultado sobre su homólogo chino, Biden señaló: “No tiene, y no lo digo como una crítica, sino que es una realidad, un solo hueso democrático en su cuerpo”.

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