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Víctima de Jefrey Epstein intentó nadar en aguas con tiburones para escapar de la ‘isla de la pedofilia’

La joven acusó al magnate de haberla secuestrado durante años para convertirla en su esclava sexual. Al día abusaban de ella hasta tres veces, por lo que prefirió escapar de una forma inadecuada de ese infierne.

La joven quiso escapar en una moto acuática hasta la isla vecina, pero fue impedida por la seguridad de Epstein. Foto: Daily Mail
La joven quiso escapar en una moto acuática hasta la isla vecina, pero fue impedida por la seguridad de Epstein. Foto: Daily Mail

Sarah Ransome se presentó ante la Justicia de los Estados Unidos como una de las víctimas de abuso sexual del multimillonario Jeffrey Epstein en la tristemente popular ‘isla de la pedofilia’.

Su relato tomó notoriedad en esta semana al conocerse que la joven víctima quiso escapar del “infierno en el que vivía” intentando lanzarse al mar abierto sin importarle que esté infestado de tiburones.

Según recoge el The Telegraph, esto lo hizo Ransome tras haber sido violada tres veces el mismo día.

“Un tiburón habría sido mi mejor amigo en ese momento. Ni siquiera lo pensé, fue solo alejarme ", dijo Sarah Ransome al medio que la entrevistó

Además, cuenta que solo llegó a subir a una moto acuática e intentó avanzar algunos metros lejos de la ‘isla de la pedofilia’, hasta la vecina St. Thomas. Sin embargo, fue vista por las cámaras de vigilancia y luego la detuvieron agentes de seguridad.

Sarah Ransome denunció haber sido la esclava sexual de Jeffrey Epstein en su contra. Foto: Daily Mail

Sarah Ransome denunció haber sido la esclava sexual de Jeffrey Epstein en su contra. Foto: Daily Mail

La mujer nacida en Sudáfrica denunció haber sido una de las esclavas sexuales de Jeffrey Epstein. Ella fue captada por una de las ‘agentes’ del magnate a su salida de un antro en Estados Unidos.

“No tenía idea del nido de avispas en el que había entrado [...] Era tan encantador y carismático", relató al The Telegraph.

En una ocasión, la misma mujer que la captó fue quien la llevó hasta la isla de Little St. James.

Desde el momento en que subió al avión “Lolita Express” fue cuando vio el lado pervertido de Jeffrey Epstein.

“Comenzaron a tener sexo duro en la cama, una de las chicas y Jeffrey”, recordó. "No había privacidad. Lo hicieron delante de todos. Y desde el momento en que llegué a la isla, fue cuando comenzó el abuso sexual”, finalizó.

Tras los años de maltrato y vejaciones, ella logró escapar cuando el magnate la mandó de nuevo a Sudáfrica para que captara a otras chicas. Sin embargo, Sarah Ransome ya no quiso regresar.

Relata que fue una sensación de alivio cuando vio que por fin Jeffrey Epstein, el pedófilo que por muchos años abusó sexualmente de ella, por fin estaba en la cárcel.

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