Marrz Balaoro,pastor transgénerode unaiglesia de Hong Kong,acudió a la Alta Corte de China para exigir que se permitan los matrimonios entre personas del mismo sexo.,Comopastor transgénerode una pequeña iglesia de Hong Kong abierta a todos, Marrz Balaoroquiere oficiar matrimoniosreligiosos entre parejas del mismo sexo, un combate que lo ha llevado ante un tribunal por miedo a ser detenido.Pese al crecienteapoyo al matrimonio entre personas de la comunidad gayen la excolonia británica -que en 1997 volvió bajo soberanía china-los activistas de los derechosLGBTtropiezan con la hostilidad de los sucesivos gobiernos pro-Pekín y de los conservadores religiosos.PUEDES VERAsesinan a dos lesbianas y escriben un mensaje de odio en sus cuerpos [VIDEO]El reverendo filipino Balaoro recurrió a la Alta Corte usando precisamente el mismo argumento que los opositores a la unión entre personas del mismo sexo, pero con el sentido contrario.Alega que la prohibición del matrimonio gay atenta contra la libertad de religiónde su congregación, un derecho contemplado en la mini-Constitución de Hong Kong.[菲藉牧師入稟要求神職人員有權主持同性伴侶結婚儀式]https://t.co/vrFhbEE9IB#Marrz Balaoro #主持同志伴侶結婚儀式 #司法覆核#婚姻條例 #菲律賓性小眾基督教會香港分堂 pic.twitter.com/8r7PwD4Imq— 門徒媒體 @apostlesmedia 5 de mayo de 2019Lo único que pedimos es que se nos autorice a practicar nuestra fe religiosa ante Dios, libres de toda persecución, afirma este pastor de 62 años.El religioso, que trabaja en Hong Kong como empleado doméstico desde 1981, fue detenido en 2017 por presunta violación de las disposiciones legales sobre el matrimonio por haber celebrado uniones santas en la iglesia cristiana lesbiana, gay, bisexual,transgéneroy heterosexual de la ciudad.Esta iglesia, que se define como cristiana ecuménica, nació en Filipinas pero cuenta con una pequeña comunidad de fieles entre los empleados domésticos gays del territorio semiautónomo del sur de China.Ceremonias ‘alegres’Estas uniones santas, en realidad una bendición, carecen de carácter legal y la fiscalía abandonó el procesamiento.Pero pese a su insistencia, el reverendo no obtuvo garantías por escrito de queno será detenido si celebra uniones santas, e incluso bodas santas consideradas por su iglesia como un sacramento a ojos de Dios.Pidió a la justiciaque diga que estas ceremonias no son ilegales por hallarse protegidas por la libertad de religión. Es consciente de que carecen de peso jurídico pero insiste en su importancia espiritual.Los fieles saben que es una celebración de su amor, del hecho de estar juntos. Son ceremonias alegres.Hong Kong no reconoce el matrimonio o uniones civiles entre personas del mismo sexo. Sin embargo una lesbiana británica consiguió el año pasado el derecho de vivir y trabajar en la ciudad junto a su compañera sentimental. Y una pareja de hongkoneses también recurrió a la justicia por considerar anticonstitucional la prohibición de lasbogas gays.Lo novedoso de la demanda de Marrz Balaoro es que se fundamenta en la libertad religiosa. Por su condición él debe oficiar bodas y además su iglesia estima que las relaciones sexuales deben limitarse al marco sagrado del matrimonio, alegan sus abogados.No a los vestidosLa legislación limita el rito religioso del matrimonio a lasparejas heterosexuales monógamas y por lo tantoes discriminatoria, prosigue.El pastor Balaoro es originario de la provincia filipina de Abra. Nació niña y se llamó Marietta pero a los cinco años empezó a sentirse varón.Cuando era más joven, mis padres no consiguieron obligarme a ponerme vestido o falda hasta que fui a un colegio católico privado. Vestía pantalones cortos debajo de la falda y una camiseta debajo de la blusa y al salir de la escuela me lo quedaba, recuerda riendo.Trabaja como empleado doméstico y es pastor desde 2013. En 2017 fue ordenado reverendo. Dejó de ir a la iglesia católica cuando era adolescente por haberse sentido discriminado, explica.Cuando descubrió el eslogan de la LGBT se te acepta por lo que eres, puedes ser lo que eres con toda seguridad encontró su vocación, dice, la posibilidad de aliar fe y militancia.