Estados Unidos

Guardia Costera de EE. UU. libera al buque canadiense Manitoulin que quedó atrapado en lago Erie por frío extremo

Un buque canadiense quedó atrapado en el lago Erie por temperaturas extremas que aceleraron la formación de hielo. La Guardia Costera intervino para liberar la embarcación y cuidar a la tripulación.

El incidente del Manitoulin subraya la importancia de la preparación ante condiciones climáticas extremas. Foto: AP
El incidente del Manitoulin subraya la importancia de la preparación ante condiciones climáticas extremas. Foto: AP

Un buque canadiense quedó inmovilizado en el lago Erie debido a temperaturas extremas que aceleraron la formación de hielo. La intervención de la Guardia Costera de Estados Unidos fue crucial para liberar la embarcación y garantizar la seguridad de su tripulación.

El carguero Manitoulin, con 17 tripulantes a bordo, se encontró en una situación crítica el 22 de enero de 2025, cuando quedó atrapado en aguas heladas tras completar una entrega de trigo en Buffalo. Este incidente, aunque no inédito, resalta la severidad de las condiciones climáticas que han afectado la navegación en la región.

Las temperaturas inusualmente bajas, que alcanzaron hasta 20°C por debajo del promedio, fueron determinantes en la rápida formación de hielo en el lago. En solo dos días, la cobertura de hielo del lago Erie pasó del 38% al 80%, según datos de Storm Team 27 y WKBN.

Impacto de las temperaturas extremas en el lago Erie

El lago Erie, el más superficial de los Grandes Lagos, es especialmente susceptible a fenómenos de congelación. Su baja profundidad permite que las temperaturas frías enfríen el agua rápidamente, lo que favorece la formación de hielo en un tiempo récord. A pesar de este evento, la cobertura total de hielo en los Grandes Lagos se mantuvo en un 23%, ligeramente por debajo del promedio histórico, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA).

Consecuencias climáticas y operativas

La rápida formación de hielo no solo complicó la navegación, sino que también tuvo repercusiones climáticas en las áreas circundantes. La presencia de hielo reduce la nubosidad y minimiza las tormentas de nieve generadas por el lago, un fenómeno conocido como “efecto lago”. Este cambio fue evidente en el Valle de Youngstown, donde las condiciones climáticas han mostrado variaciones significativas.

El incidente del Manitoulin, aunque esperado en la temporada invernal, subraya la importancia de la preparación ante condiciones climáticas extremas. Los cargueros que operan en los Grandes Lagos están diseñados para navegar en hielo, pero las condiciones actuales superaron las capacidades normales de estas embarcaciones. Paul Angelillo, especialista en búsqueda y rescate de la Guardia Costera, destacó que las temperaturas invernales no habían alcanzado estos niveles en años, lo que sorprendió tanto a las tripulaciones como a los residentes locales.

Rescate y futuro de la navegación en el lago Erie

Afortunadamente, el Manitoulin no sufrió daños estructurales y su tripulación se mantuvo a salvo durante el rescate. La intervención de un rompehielos fue esencial para liberar la embarcación, rompiendo las capas más densas de hielo que la rodeaban. Este tipo de apoyo es crucial en invierno, cuando la formación de hielo puede superar las capacidades de navegación.

Este episodio resalta cómo los cambios extremos en las condiciones meteorológicas pueden afectar las operaciones de transporte marítimo y las dinámicas climáticas regionales. Aunque la formación de hielo es común en el lago Erie, su crecimiento acelerado y la dureza de las capas congeladas han llamado la atención de expertos y del público en general.

Además, plantea interrogantes sobre la preparación de las embarcaciones y las infraestructuras portuarias para enfrentar condiciones climáticas más severas, que podrían volverse más frecuentes debido al cambio climático. Las intervenciones de la Guardia Costera y los avances tecnológicos en rompehielos seguirán siendo fundamentales para garantizar la seguridad y funcionalidad de las rutas marítimas en los Grandes Lagos durante el invierno.