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Economía

Kurt Burneo: “Lo ideal es que el Congreso apruebe los 16 proyectos de ley y echar a andar el plan de reactivación”

El titular del MEF comenta las expectativas y alcances que se tendría con el plan de reactivación Impulso Perú. “Pueden haber iniciativas legislativas con una muy buena voluntad, pero que no conjugan con que haya más confianza”.

El ministro de Economía busca impulsar el crecimiento del país en lo que resta de 2022. Foto: Gerardo Marín/La República
El ministro de Economía busca impulsar el crecimiento del país en lo que resta de 2022. Foto: Gerardo Marín/La República

A poco más de un mes de asumir las riendas del despacho de jirón Junín, el ministro Burneo comenta las expectativas y alcances que se tendría con el plan de reactivación Impulso Perú. Iniciativas que impliquen gasto, como alza de pensiones, no se contemplan por ahora.

Ministro ¿Cómo asegurar la correcta ejecución del presupuesto para el 2023 en la medida que hay un cambio en los gobiernos subnacionales?

— Vamos a desarrollar una capacitación a nivel de alta dirección de los gobiernos subnacionales, o sea gobernadores, miembros del Consejo Regional y alcaldes. Y, otro curso respecto a gestión pública para el personal que mira la parte operativa. No vamos a esperar a enero para capacitarlos, la idea es que luego de octubre en adelante desarrollar una serie de actividades de capacitación para estos grupos. La otra cosa importante que creemos que puede resultar va por el lado de la asistencia técnica que da el ministerio a los gobiernos subnacionales. Y ahí estoy pensando por ejemplo en lo que es CONECTAMEF, uno mucho más empoderado, con mayor cantidad de recursos y con el cambio cualitativo de no solamente transferir o informar de los problemas, sino resolverlos in situ. Creemos que con estas iniciativas vamos a poder reducir o moderar sobre todo lo que es el bajón en cuanto al ritmo de gasto que ocurre en el primer trimestre del año siguiente tras un proceso electoral.

Esto quiere decir la eficiencia en la calidad de gasto es central.

— Tan importante como el que haya recursos tributarios incrementados producto de la reactivación, es que esos recursos tienen que ser ejecutados. El problema está cuando se traslada recursos y el pliego no devenga en la magnitud que debería de hacerlo. Es por eso, por ejemplo, que en el presupuesto del próximo año prácticamente no se están financiando proyectos nuevos. ¿Cuál es el mensaje? Que sobre la base de más de 2.300 proyectos de inversión que están abandonados o que no han perdido la cadencia, estamos estoqueándonos de proyectos que deberían de ser desarrollados. El punto es que para poder, vamos a decirlo así, evitar o ser más eficiente en la gestión, el mensaje a los sectores y a los pliegos es gastar primero lo que tienes y sobre esa base recién podemos discutir posibilidades de proyectos de inversión nuevos, a futuro. Entonces, esto definitivamente implica una mejor gestión, la más eficiente por el lado de lo que es los proyectos de inversión.

En aras de la reactivación económica usted ha dado señales claras al acercarse a diversas entidades y agentes económicos.

— Al respecto debo decirle que los primeros días en que llegué al ministerio fui bastante activo en interrelacionar con distintas entidades que son claves para lo que es la gerencia, la gestión de recursos en el MEF. Por eso es que me reuní con Julio Velarde del Banco Central, para que haya claridad en que el hecho de que yo haya pedido coordinación entre política monetaria y política fiscal, o sea, coordinación entre el Banco Central y el MEF, hace sentido en el entendido de que la política macroeconómica implica hablar de la política fiscal y la política monetaria. Cuando digo coordinar no significa en lo absoluto afectar autonomía.

Lo que decía simplemente es que nos pongamos de acuerdo en temas tan pedestres como las emisiones, porque cuando no hay coordinación podría suceder que tanto el Ministerio de Economía como el Banco Central vayan a la misma vez al mismo mercado y con precios parecidos, entonces esa falta de coordinación va a hacer que el costo de financiamiento sea más caro para los dos; por lo tanto la coordinación debe verse en ese sentido. No en lo absoluto en afectar autonomía, porque además en el supuesto negado que yo tuviese esa intención, no podría hacerlo, sencillamente porque hay una ley orgánica que dice claramente cuáles son las competencias del BCR y existe la Constitución Política del Estado que también habla de autonomía del Banco Central. En el pasado yo fui director del BCR en tiempos en el que compartía el directorio con Julio Velarde, y la relación de conocimiento a nivel profesional ha sido muy adecuada, no tenía por qué ser distinta.

Tuvo el mismo gesto fue hacia la mesa directiva del Congreso.

— De esa misma manera, en las primeras semanas me fui al Congreso a reunirme con la Mesa Directiva también para coordinar mejor, desde la perspectiva de los proyectos de ley que generan los señores congresistas, y los PL que vienen del Ejecutivo. La idea es tener un conocimiento en tiempo real de las iniciativas legislativas, para evitar fricciones, y se tuvo muy buena aceptación por ese lado. A continuación, me reuní con gremios empresariales y gremios laborales para decirles qué problemas tenían ellos, cuáles eran sus propuestas y comentarles qué es lo que estábamos pensando hacer en línea con la política económica, por lo menos en lo que corresponde a la parte fiscal.

Ese tipo de reuniones de acercamiento tuvieron un propósito desde el inicio, y es mejor tener un nivel de coordinación. Para poder explicar en este caso el Plan de reactivación económica, Impulso Perú, por ejemplo en cosas tan concretas como el otorgamiento de subsidios necesitan proyectos de ley y es lo que estamos haciendo, formulando para que el próximo miércoles en Consejo de Ministros se aprueben esos proyectos que van a seguir su proceso regular y van a ser remitidos al Congreso.

¿A qué responde el plan de reactivación Impulso Perú?

— El crecimiento ha sido heterogéneo. En ese contexto, si es que no planteamos un programa de reactivación, lo que iba a ocurrir, en mi opinión, inexorablemente, es que la tasa de crecimiento se iba a seguir desacelerando. En esa medida consideramos que era fundamental intervenir a través de este programa, justamente para dinamizar la economía, dado el círculo virtuoso que genera; una tasa de crecimiento más alta implica un mayor incremento en la producción y venta de las empresas, las oportunidades de las empresas para que puedan tener utilidades, pero también el incremento de la demanda de empleo, que depende de las necesidades de producción. Y, por supuesto, el incremento en la recaudación tributaria.

O sea, estamos hablando que una aceleración en cuanto a la actividad económica como consecuencia de la aplicación de este plan evidentemente genera un esquema ganar-ganar para todos.

La proyección de la inversión privada para este año es de un avance de 0%, ¿Impulso Perú tendrá algún impacto en este indicador?

— La idea es tratar de propulsar esto de tal manera que tener resultados ya en este año a pesar de que estamos entrando en el último trimestre. Ahora el tema de que las proyecciones que hemos establecido sobre lo que es el producto bruto interno y la proyección inicial para este año es que sea en 3,3% tal como está en el Marco Macroeconómico. El punto es que como consecuencia de la aplicación de este plan de reactivación podemos aspirar a un crecimiento quizás de 0,2, adicional, podemos llegar hasta el 3,5%.

Una cifra corta...

— Puede parecer la cifra pequeña, pero en realidad, el programa, el plan de reactivación Impulsa Perú ha sido muy cuidadoso con el tema de respeto a los límites fiscales, tanto a lo que corresponde a lo que es el déficit fiscal como también lo que corresponde al ratio de deuda pública sobre PBI. Pero la expectativa, a su vez, también es que estamos hablando de mínimos en términos de recuperación. Podríamos pensar que en la medida que las cosas se puedan dar, sobre todo mejorando las expectativas, los resultados de incrementar sobre el PBI podrían ser un poco mayores a lo que estoy refiriendo. Pero aquí lo más importante es la mirada cualitativa del tema, es decir, no estamos cruzados de brazos respecto a lo que está pasando con la macro y en general, y en específico con la actividad económica.

Considerando que gran parte de las normas propuestas deben pasar por el Congreso, ¿de qué manera se puede tener certeza de su efectividad?

Lo ideal es que el Congreso se pueda pronunciar rápidamente sobre lo que son estas iniciativas legislativas que son 16 de un total de 25. El tema ahí de por medio es que el Congreso, con serenidad, pueda tratar de evaluar estos proyectos de ley y consecuentemente, en función de eso, echar a andar efectivamente el plan de reactivación.

Una variable crítica por supuesto es en qué medida el Congreso pueda procesar esta cantidad de proyectos de ley que van a ser remitidos, pero la expectativa es que eso se pueda hacer rápidamente, en la medida que tengamos las aprobaciones del proyecto de ley va a ser más rápida la implementación del plan.

Consenso. 16 normas de Impulso Perú pasarán por el Congreso. Foto: Antonio Melgarejo/La República

Consenso. 16 normas de Impulso Perú pasarán por el Congreso. Foto: Antonio Melgarejo/La República

Usted denunció que algunos congresistas lo habían agredido verbalmente. ¿Se podría saber quiénes son?

— Preferiría no ahondar en ese tema porque es lo anecdótico, pero el hecho de llamar la atención en el mismo Congreso respecto al respeto que debe mantenerse, no solamente con los ministros de Estado, sino con cualquier persona, me parece que es un elemento básico para poder conversar entre personas que quizás tenemos una forma diferente de pensar.

En la búsqueda de recuperar la confianza de los agentes económicos, ¿qué nivel de receptividad ha tenido su gestión con el sector privado? ¿Cómo va ese termómetro empresarial?

— Diría que de los mejores, puede ser que esto vaya en contrasentido de lo que se visualiza, pero los gremios y los empresarios empiezan a mirar al Ministerio de Economía y Finanzas como una senda, un puente de interacción, sin que haya cortapisas, trampas ni demás, un puente donde hay fluidez, en cuanto a las iniciativas legislativas y a las respuestas que uno esperaría de ellas, en el caso del sector privado y los gremios, es cierto, tienen una fijación especial sobre lo que es la normatividad laboral actual, ahí estamos hablando de lo que es la negociación colectiva y de la tercerización. Entonces, ante la pregunta de ellos de qué es lo que estamos pensando en el MEF sobre ese tipo de iniciativas que ya existen, no es que están por darse, lo que decimos es que estamos evaluando ello porque se necesita en un proceso de evaluación.

¿Cuál es su evaluación de esas dos medidas laborales?

— A mí me interesaría compartir eso con el Consejo de Ministros porque evidentemente pueden haber iniciativas legislativas con una muy buena voluntad, pero desafortunadamente no conjuga con lo que vendría a ser el entorno económico por un lado, y por el otro, el hecho de que haya más confianza, entonces no doy una respuesta definitiva sobre ese tipo de iniciativas porque mi expectativa sobre ellas es conversar con los ministros en el Consejo y poder llegar a algunos acuerdos, por eso es que no adelanto ninguna opinión sobre el tema de estas dos iniciativas laborales que causan bastante escozor por el lado del sector privado.

Pero el tema es que la actuación del sector privado en economía no solo implica mirar lo que es la normatividad laboral, hay otros aspectos, por ejemplo, el tema tributario, la estabilidad tributaria a nivel de tasa o podemos hablar también de las acciones de ayuda para por el lado de la oferta, para que la producción, los productores tengan, incurran en menos gasto; tengan menos costos para producir. Por eso el programa Impulso Perú de reactivación no solamente da medidas por el lado de la demanda, sino por el lado de la oferta. Cuando hablo de medidas por el lado de la oferta estoy hablando de la posibilidad de que los costos de producción sean menores y consecuentemente con eso, combinado con aumentos en la demanda y evitemos la existencia de presiones inflacionarias a continuación.

Fonavi y reforma previsional

Sobre el tema previsional. ¿El MEF está evaluando elevar la pensión de la ONP?

No, de principio no. Lo que sí está considerando es que en el caso de Pensión 65 hay un incremento de S/50, eso está puesto ya. Pero el otro tema relacionado a la ONP, yo creo que tiene que ser sujeto a evaluación, porque no hay que olvidar que a final de cuentas lo que hace el Ministerio de Economía es administrar la escasez, recursos limitados, necesidades ilimitadas. Si este plan funciona, definitivamente va a haber un efecto incremental sobre la recaudación tributaria, y eso puede servirnos para que en un futuro cercano se pueda considerar un incremento en el caso de las pensiones que tienen los afiliados a la ONP.

En el Congreso se ha puesto en el tapete nuevamente una eventual actualización del Bono de Reconocimiento. ¿Ese tema se podría analizar?

— Lo que puedo decirle es que presiones al gasto van a haber, y no solamente por el lado de iniciativa del Congreso, sino por el lado de la iniciativa del Poder Ejecutivo. Lo normal o regular es que haya presiones de gasto. Obviamente, no se pueden resolver todos los problemas en un ejercicio fiscal, hay que establecer prioridades. Sería absolutamente imprudente de mi lado que yo asegure incrementos, ya sea salarial, de pensión, de lo que sea, cuando todavía vamos a mirar cómo reacciona la economía frente al plan de reactivación planteado.

Un fierro caliente que su gestión heredó es el pago a fonavistas previa instalación de la comisión ad hoc. La gran duda que tienen los fonavistas es si el MEF pagará la deuda completa.

— Yo diría que eso hay que evaluarlo en función de las proyecciones que hacemos a nivel de ingresos y gastos. Entiendo perfectamente que hay derechos generados por la ley que deben ser cumplidos, pero la ley no me dice que tengo que hacerlo en un par de meses, o sea, puede haber una perfecta gradualidad en esas cosas, pero esa gradualidad inclusive tiene que estar sujeta a mirar respecto a la disponibilidad fiscal. No niego que definitivamente hay que conversar estas cosas, pero el hecho de conversar o que haya presiones a mayor gasto no significa que esto se efectivice. Podemos pensar en un tema de gradualidad cuando hay este tipo de presiones.

Ministro, el presidente anunció en su mensaje a la nación que se iba a presentar en seis meses una propuesta para la reforma del sistema previsional. Según el MEF, ¿cuáles son los pilares fundamentales que debería contar una nueva reforma previsional en el Perú?

La sostenibilidad, si es que uno plantea reforma del sistema previsional, cuán sostenibles son las nuevas reglas de juego que regirían el mismo. No olvidemos que cuando hablamos de lo que es la previsión social, estamos hablando de lo que es el interés de dos de cada 10 trabajadores, porque actualmente 8 de cada 10 trabajadores son informales o subempleados, y para ellos no existe previsión social.
Yo diría que el tema de los sistemas previsionales debería implicar previamente la discusión en qué cosa hacemos para formalizar o avanzar en la formalización de lo que es el mercado laboral, sino seguimos discutiendo sobre una élite de 2 de cada 10 trabajadores.

Posición sobre el rol de Petroperú

Ministro considerando que el MEF es parte de la Junta General de Accionistas de Petroperú ¿Cómo se contrapone la posición de uno de los dueños de la empresa con la voluntad expresa del presidente de la República sobre fortalecer Petroperú y que participe en todos los eslabones de la cadena?

— Creo que, como varias cosas al interior del Poder Ejecutivo, el presidente tiene la apertura de escuchar. Entonces, por lo menos en lo que a mí respecta, cuando despacho con el presidente hay una relación más o menos fluida, eso es, por un lado. Por otro, no hay que perder de vista que para tomar decisiones, en la empresa pública y privada también, se necesita información y hasta donde yo sé en el caso de Petroperú el informe de parte de la auditora, que es PwC, todavía está por salir el día de hoy (viernes). Entonces, tenemos que tener cierto conocimiento del informe, en este caso la auditoría. Claro, es del año 2021, pero nos da una idea un poco del estado de situación financieramente hablando de la empresa, para sobre la base de esa información poder pensar en qué alternativas podría haber para el caso Petroperú.

Específicamente usted declaró a medios extranjeros su oposición a que la estatal no ingrese a la etapa de explotación.

— Pero en este caso específico, creo yo que la iniciativa de informar y de presentar alternativas viene de quiénes están a cargo de la gestión. En lo que a mí respecta, formo parte de la Junta de Accionistas, pero Petroperú tiene un directorio, tiene un equipo de gestión y de lo que se trata no es solamente de que señalen la dificultad, que definitivamente se gatilló porque se retrasó la generación de los informes de auditoría. El tema ahí no solamente es presentar el problema por el lado de la gestión o de la administración encargada de la empresa, sino también opciones de solución o resolución del problema.

Finalmente, en el caso, por ejemplo, de esta reducción en la calificación, esto es simplemente la normalización de algo que había ocurrido desde el mes de marzo, S&P ya le había reducido la calificación. Y el otro tema importante es, lo que ha pasado con Fitch, ha confirmado lo que ya había señalado desde marzo S&P.

Pero el otro tema importante a considerar primero, es que la volatilidad del precio del petróleo ya genera una serie de problemas a una serie de empresas, no solamente a Petroperú. Estamos hablando de otras empresas petroleras a nivel latinoamericano. Y la otra cosa importante, creo que hay un poquito de confusión, si bien es cierto, con esta calificación, esta rebaja, este downgrade por el lado de Fitch respecto a lo que venía a ser a Petroperú como emisor, si bien es cierto se sale del esquema del grado de inversión a grado especulativo, eso no equivale a que una empresa tenga que ser calificada con grado especulativo, no equivale a bono basura.

O sea que, lo que se está diciendo con poco, muy poco conocimiento, porque dentro de lo que es el grado de especulativo hay una serie de niveles y el nivel C es cuando ya se está como bono basura. Cuando ya se está en bono basura, estamos hablando de bonos que no son muy demandados en el mercado, sencillamente porque el rendimiento exigido dado el mayor riesgo es bastante alto, pero lo que ha pasado con Petroperú no implica que llegara una calificación como C. Sino se ha producido en la normalización respecto a la calificación que había dado S&P, lo que no quita definitivamente que haya retos financieros para la empresa.

Para comenzar el tema de la Refinería, o sea, el gobierno apoyó con US$ 750 millones, pero para que funcione la Refinería, aparentemente se necesita más recursos. Entonces, mal haría yo comentando, por ejemplo, sobre la situación financiera de Petroperú, cuando no tengo los estados financieros o en todo caso los informes del auditor que deben conocerse hoy día o mañana.

Se necesita mayores elementos de información para ver lo que pasa, pero una posición muy personal es que primero Petroperú tiene que resolver los problemas financieros que hay, que entiendo yo básicamente son de liquidez, y no de solvencia. Cuando hablamos del problema de liquidez, lo que está diciendo es, los recursos van a llegar desfasado, pero van a llegar en el tiempo. Cuando se habla de un problema de solvencia, ya estamos hablando de un problema estructural, ahí no es que los recursos van a llegar después, sino sencillamente que no van a llegar. Y ahí estamos hablando de otro tipo de problema, para hablar de estas cosas, un poco más de detalle requería ver, para comenzar, el informe de la auditoría que creo que se entrega hoy.

“Acortar procesos para acceder a recursos tributarios”

La recaudación se está desacelerando, ¿seguirá esta tendencia?

— Esperamos que, en la medida, el plan de reactivación que hemos presentado empiece a dar sus frutos, empiece a generar un mayor nivel de actividad económica y a la vez una mayor recaudación tributaria sin cambiar la estructura tributaria, sin cambiar tasas. El incremento de la actividad económica implica una base imponible más grande y, por tanto, la posibilidad de recuperar una parte de los ingresos tributarios.

¿Ayudaría el pago de las grandes deudas tributarias?

No hay que olvidar que la recuperación de recursos que están sujetos a controversias, hablo de pagos tributarios, obligaciones tributarias que se han puesto en cuestión, son ingresos por una sola vez.

¿El MEF tiene algún planteamiento sobre el compromiso del Gobierno de cobrar esas deudas?

— La idea es que los procesos tienden a reducirse, hacerlos más eficientes para que con una mayor oportunidad el Estado pueda accesar a esos recursos que tienen carácter tributario, o sea, obligaciones tributarias que no han sido pagadas, han sido apeladas. La idea es acortar esos procesos porque nos hemos dado cuenta de que en la medida en que estos procesos de recuperación o de resolución de controversias en temas tributarios, cuanto más tiempo dura, la probabilidad de que se ingrese un esquema de prescripción es mayor.

¿Eso qué permitirá?

— Apuntalar en términos de oportunidad la resolución de las diferencias que hay en cuanto a lo que es pago de carácter tributario, pero en realidad hablamos de pago de una sola vez, o sea, lo fundamental, mirando la perspectiva de las finanzas públicas.