Sudamérica gesta un nuevo polo energético

Agencias

Surinam, Guyana y Brasil unirán recursos para desarrollar el sector gasístico y la economía de Sudamérica, anunció esta semana el presidente del primero de los tres países, Chandrikapersad Santokhi, durante la apertura de la cumbre Conferencia Internacional de Energía y Expo Guyana.

Guyana y Surinam, países que han alcanzado un nuevo rol en el sector energético tras sus recientes hallazgos, tienen una obligación con el cumplimiento de los estándares ambientales. El plan que involucra a los tres países también beneficiará a la región caribeña.

”La pregunta es cómo hacemos esa transición utilizando nuestros nuevos recursos para asentar una economía más diversificada para las generaciones venideras. Surinam y Guyana, con estos nuevos recursos, pueden mitigar la pobreza energética que dificulta el desarrollo de vidas productivas”, indicó Santokhi.

Por su parte, el vicepresidente de Guyana, Bharrat Jagdeo, dejó abierta la posibilidad de que su nación diseñe una compañía petrolera, tras el descubrimiento de yacimientos en su costa durante los últimos años. La producción de petróleo de Guyana desde 2015 proviene de los bloques situados frente a sus costas.

Ya el año pasado la inversión en hidrocarburos había tomado mucha fuerza en la región más boreal del continente. Para entonces, se preveía la creación de un corredor regional de transporte de gas que vincule la infraestructura energética de esos territorios. El proyecto había estado en conversaciones durante varios años, ya que el BID realizó estudios en 2016 y 2017 sobre lo que llama la Interconexión Eléctrica Arco Norte.

Gas en el Altiplano

En la región central de la cordillera de los Andes, los motores del desarrollo también respiran nuevos aires. En Bolivia, se anunció recientemente el hallazgo de nuevas reservas en un megacampo de gas natural, por un estimado de 300 a 350 billones de pies cúbicos, que generarán ingresos adicionales al fisco por más de US$ 260 millones anuales cuando sean explotadas.

Los desafíos son enormes. Precisamente, esta semana S&P Global Ratings planteó sus preocupaciones sobre la “reducida capacidad exportadora” del sector gas en Bolivia, aún en zona ‘B+/B’.