FBC Melgar tocó el cielo en Arequipa: Rojinegros clasificaron a octavos de final de la Sudamericana

Melgar escribió anoche una de las páginas más felices de su historia. La victoria ante Cuiabá de Brasil por 3-1 y la derrota de Racing en Argentina, 1-0, ante River de Uruguay, le dieron la clasificación a los octavos de final de la Copa Sudamericana 2022.

Al término del partido, los jugadores estaban con lágrimas de alegría, se dieron abrazos eternos, y alzaron los brazos agradeciendo a Dios. La euforia fue total en la cancha y en las tribunas del estadio Monumental Arequipa.

Se logró la hazaña, la revancha del año pasado porque quedaron segundos, la revancha ante Cuiabá que les ganó en Brasil.

El mejor equipo del fútbol peruano le dio una alegría al país para que se olvide de vergonzosas derrotas.

Hoy el festejo es de todos los peruanos que aplauden la gran campaña de Melgar. En la postal del recuerdo todo un gran grupo, incluyendo al inversionista Jader Riskqalla quien también sufrió los infartantes momentos de la gran noche de mayo.

Triunfo con angustia

Sin pensar en lo que podía suceder en Argentina, FBC Melgar tomó la iniciativa del ataque. Con Iberico, Quevedo y Vidales, se encargaron de gestar las jugadas de gol. Faltó precisión en el remate final.Sin embargo, fue Archimbaud quien puso el primer festejo dando la tranquilidad del caso. Ante un Cuiabà que propuso poco y llegó a Arequipa para salvar por lo menos un punto.

Para el segundo tiempo el técnico Lorenzo hizo ingresar a Ramos en defensa, Arias al medio y Cuesta en ataque. Por el sector de Ramos llegó el único error que permitió el empate por medio de Nescau a los 61 minutos. Nadie imaginó que solo minutos después habría gol de River en Argentina y que las posibilidades de clasificar estaban intactas.

De pie, las tres tribunas del estadio empujaron a Melgar hacia el triunfo. Las ansias, la obligación de ganar, el reloj y Cuiabá cerrado atrás, jugaron en contra. En la cancha Lorenzo ordenó el equipo, pidió calma y el juego por los laterales.

Mientras la información daba cuenta de que Racing caía, llegó el angustiante gol de Bordacahar faltando cinco minutos para el final. Con otro cabezazo, el argentino hizo el tercero a los noventa. Había que esperar el pitazo final en Arequipa y en Argentina. Un gol de Racing hubiera apagado toda celebración.

Se dio, los albicelestes perdieron y los rojinegros ganaron.