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Nagoro, la aldea de los muñecos vivientes: conoce más detalles sobre este espeluznante lugar

Un misterioso pueblo fantasma, cuyos habitantes se han convertido en muñecos de algodón y estambre: esta es la historia de Nagoro.

Según comentan lo pobladores de Nagoro, el último niño de la localidad nació hace 18 años. Foto: Infobae
Según comentan lo pobladores de Nagoro, el último niño de la localidad nació hace 18 años. Foto: Infobae

¿Te imaginas que al visitar una aldea seas recibido por muñecos de trapo y no por personas? Aunque pueda parecer algo extraño y terrorífico, esto sucede en Nagoro, una pequeña comunidad japonesa habitada por más muñecos que personas.

Conocida como ‘la aldea de los muñecos’, Nagoro está ubicada en la isla de Shikoku, en la prefectura de Tokushima, Japón. Aunque hace más de 60 años esta comunidad estaba poblada por mujeres, hombres y niños, actualmente solo cuenta con un total de 380 habitantes: 30 personas y 350 muñecos.

Estas representaciones —hechas de algodón, tela y estambre, y vestidos con prendas usuales de los pobladores—, fueron fabricadas por una sola persona: Ayano Tsukimi, una mujer de 72 años.

Nagoro, la aldea de los muñecos

Foto: AFP

¿Cómo surgió ‘la aldea de los muñecos’?

En el 2002, cuando Ayano Tsukimi regresó a su pueblo natal de Nagoro, encontró una aldea vacía y desolada. Casi todos sus habitantes ya habían fallecido o emigrado a las ciudades más grandes de Japón. Es por esto que, para evitar que su aldea se vea desierta, comenzó a reemplazar a las personas que solían vivir en Nagoro por muñecos.

Esta idea de fabricarlos nació a partir de la celebración japonesa conocida como undokai, una festividad en la que niños de todas las escuelas compiten en diferentes actividades deportivas.

Nagoro, la aldea de los muñecos

Ayano Tokushima cosió muñecos de trapo para reemplazar a los estudiantes en la escuela central de Nagoro. Foto: AFP

Como la escuela central del pueblo había cerrado hace más de 10 años y no había quien celebrara el undokai, Ayano Tsukimi decidió coser muñecos a tamaño real de los estudiantes.

Colocó a los ‘niños de algodón’ por toda la escuela, en los salones, sobre los columpios, en la pista de carreras escolar y en posiciones para lanzar una pelota. Es así como inició esta labor de confeccionar muñecos para alegrar la aldea de Nagoro.

Nagoro,

Foto: AFP

¿Dónde viven los muñecos?

Los muñecos que fabrica Ayano Tsukimi parecen tener vida propia. Están dispersos por toda la aldea de Nagoro. En las puertas de las casas, en la escuela, en el pasto, en la parada de autobús, junto al río o simplemente tirados en el piso tomando una siesta.

Nagoro

Foto: AFP

¿Qué pasó con los habitantes de Nagoro?

Después del terrible accidente nuclear de Fukushima que ocurrió en el 2015, la población de Nagoro declinó rápidamente. Los ancianos fueron muriendo mientras que los más jóvenes partieron en busca de mejores oportunidades.

Según cuentan los pocos habitantes que habitan en esta aldea, el último niño nació hace más 18 años. En la actualidad, solo quedan 30 personas en esta comunidad japonesa.

Nagoro, la aldea de los muñecos de trapo

Los muñecos han convertido a la aldea de Nagoro en una bella atracción turística. Foto: AFP

“Pensé en plantar semillas”

En un principio, la idea de Ayano Tsukimi para poblar la aldea de Nagoro era muy diferente. Deseaba darle vida a través de la jardinería. “En un principio yo planté semillas, pero estas nunca crecían, entonces mientras esperaba que crecieran comencé a hacer los muñecos”, comentó Ayano en una entrevista con BBC Mundo.

Nagoro, el pueblo japonés de los muñecos

Foto: CC/magazine

El primer muñeco en Nagoro

Para evitar que las aves se comieran las semillas de chícharos y rábanos que había plantado, Ayano Tsukimi cosió un espantapájaros a imagen y semejanza de su padre. Este quedó tan real que Ayano decidió fabricar más muñecos de trapo.

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