Fuertes lluvias desde este jueves 28 de marzo
Cultural

Scarlett Johansson, la diva enamorada

Estrella. La actriz mejor pagada de Hollywood, comprometida con el cómico Colin Jost, habla de sus dos matrimonios fallidos. “Me siento en mi lugar en el mundo, capaz de tomar decisiones más activas”.

Con información de Vanity FairScarlett

Considerada una de las divas indiscutibles de Hollywood, Scarlett Johansson inició su carrera en la industria cinematográfica a muy temprana edad. Hoy, con 35 años cumplidos hace una semana, dos divorcios y considerada la mejor pagada de Hollywood, revela un poco de su intimidad y refiere que sigue creyendo en el matrimonio. En marzo de este año, hizo público su compromiso con el cómico estadounidense Colin Jost, lo que hace presagiar que habrá una tercera boda.

“La primera vez que me casé tenía 23 años”, reflexiona sobre su primer matrimonio, con el actor Ryan Reynolds, con quien estuvo casada entre 2008 y 2010. “En realidad no comprendía bien lo que era el matrimonio. Creo que, de algún modo, le di una visión demasiado romántica. Ahora es una cuestión diferente de mi vida. Me siento en mi lugar en el mundo, capaz de tomar decisiones más activas. Creo que estoy más presente de lo que estaba antes”, explica sobre su modo de asumir las relaciones románticas.

En el 2014, Scarlett se casaba en secreto con el periodista Romain Dauriac, después de que la actriz diera a luz a su única hija, Rose Dorothy. En marzo del 2017, sus abogados presentaban en una corte de Nueva York los papeles del divorcio aludiendo que el matrimonio estaba “irremediablemente roto”. Dauriac confesaba estar en shock. La batalla legal duró 12 meses.

“La idea de crear una familia, construirla y trabajar en ella me gusta. Creo que sería fantástico, siempre lo he querido. También lo quise en mi matrimonio con el padre de mi hija. No era la persona adecuada, pero me gusta esa idea”, confiesa la estrella estadounidense.

La intérprete que da vida a la célebre Viuda Negra de Marvel no solo habló de sus amores fallidos, sino de su relación con el polémico Woody Allen, a quien defendió en septiembre cuando aseguró que le creía y volvería a trabajar con él, originando una lluvia de críticas. “No soy política y no puedo mentir sobre cómo me siento sobre ciertas cosas. No tengo por qué hacer eso. No es parte de mi personalidad. No quiero tener que editarme ni moderar lo que digo o pienso. No puedo vivir de ese modo, yo no soy así. También creo que cuando tienes esa clase de integridad probablemente va a fastidiar a algunas personas. Es parte de cómo funciona todo, supongo”. Directa, agrega que Allen “forma parte de mi experiencia. Yo no sé más cosas que los demás, solo que tengo mucha cercanía con Woody. Es mi amigo. Pero no tengo más percepción que mi propia relación con él”, afirma.

Finalmente, responde sobre su nuevo ‘título’: la mejor pagada de Hollywood. “Es maravilloso porque me da la posibilidad de no sentirme obligada a trabajar constantemente. Puedo tener tiempo. No tener que coger un trabajo porque necesito mantenerme, como básicamente todo el mundo en la industria tiene que hacer. Sé cómo funciona... Así que es genial. Es un lujo, un lujo enorme”.

Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.